Y no, no estoy hablando de la marihuana. Al menos una vez en nuestra vida hemos tomado un té de yerbabuena para el dolor de barriga, nuestras mamás nos han untado árnica en ese raspón de rodilla o nos han repetido mil veces las maravillas de los remedios naturales. Sin embargo, hay ocasiones en las que debemos tener cuidado con las hierbas que tomamos.
