Aunque no es un producto milagro, un compuesto que se encuentra en esta deliciosa fruta ayuda a perder peso y mejorar la función del hígado, al quemar la grasa que se encuentra en este órgano.
Estoy hablando de la uva de la variedad Muscadine (uva roja), y su efecto se descubrió gracias a un estudio donde se les dio extracto de uva roja a ratas con sobrepeso. El extracto de uva ayudó a las ratas a reducir los niveles de azúcar en la sangre y la cantidad de grasa en sus hígados.
También se identificó el compuesto contenido en la uva roja que es causante de este maravilloso efecto: el ácido elágico. Al agregar ácido elágico a células de hígado humano y adipocitos (que son las células que almacenan la grasa en nuestro cuerpo), los adipocitos crecieron más lentamente y dejaron de multiplicarse.
Esto significa que beber jugo de uvas rojas puede ayudarnos a perder peso y también a controlar ciertos desórdenes metabólicos, como el “hígado graso”. Y lo mejor de todo es que el ácido elágico no solo está presente en las uvas como tal, sino también en las uvas hechas ¡vino tinto!
Así que ya puedes agregar a tu lista del supermercado un racimo de uvas, y ¿por qué no? Un buen vino tinto. Todo para estar en forma.
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Por: Paulina Morlay
vía: Nutritional Biochemistry